…el coste de la armadura de un caballero medieval no es tan diferente del coste del traje de Iron Man?
A primera vista, la comparación puede hacernos reír, pero si nos paramos a observarlo detenidamente… ¡no tanto!
Tanto la equipación para la batalla del caballero medieval como el traje de Iron Man han sido diseñados con la tecnología más novedosa de su época (en el caso de Tony Stark, la futura), para conseguir una misión fundamental: salvar la vida del que lo lleva puesto. En el momento de crearse la Orden de Santiago, la máxima vanguardia en la tecnología militar eran las cotas de malla sobre ropa acolchada, que permitían un buen equilibrio entre movilidad y protección, pues aún no había armas de gran poder de penetración como ballestas o arcos largos, ni tecnología metalúrgica para preparar armaduras complejas y finas que pudiera sujetar un caballo.
Equipar a nuestro caballero para ir de una manera decente y digna a la batalla nos podría costar entre los 1.000 maravedíes —si fuéramos buscando ofertas—, y los 2.700 maravedíes de plata, si quisiéramos demostrar poderío y nivel.
Pasados estos importes a nuestra moneda actual, nos encontraríamos que un caballero tendría que gastarse entre 700.000 y dos millones de euros. Vamos, no llega al traje de Iron Man del magnate Stark pero ¡también había que ser millonario para poder permitírselo!