La Iglesia de la Virgen de la Luz es uno de los templos más bonitos de la ciudad de Cuenca. Situada en el barrio de San Antón, junto al río Júcar, esta iglesia católica es un verdadero tesoro arquitectónico que merece la pena visitar.
Con una ubicación privilegiada, cerca del río, parques, restaurantes y del centro de la ciudad, la Iglesia de la Virgen de la Luz es un lugar que no puedes dejar de visitar si te encuentras en Cuenca. Cuenta con acceso para sillas de ruedas, lo que la hace accesible para todos los visitantes.
En su interior, podrás admirar los preciosos frescos del techo, cuidados con esmero, que le dan un toque de elegancia y belleza indiscutible. La atmósfera cálida y acogedora invita a la contemplación y la reflexión, convirtiéndola en un espacio perfecto para desconectar del bullicio de la ciudad.
La Iglesia de la Virgen de la Luz alberga a la patrona de Cuenca y diversas imágenes que procesionan en Semana Santa, siendo punto de partida de la procesión del Jueves Santo. Sus pasos de Semana Santa son de una belleza indescriptible, atrayendo a numerosos visitantes cada año.
Si eres amante de la arquitectura barroca, este templo conquense te sorprenderá gratamente. Su ubicación a orillas del río Júcar le confiere un marco de gran belleza, convirtiéndola en un lugar imprescindible para todos aquellos que deseen conocer la esencia de Cuenca.
Si visitas Cuenca, no puedes dejar de conocer este emblemático templo que sin duda dejará una huella imborrable en tu corazón.