La Iglesia de Nuestra Señora de la Sey, ubicada en la Plaza Francisco Ruiz de Alarcón junto a su bonito ayuntamiento porticado, es una verdadera joya que merece la pena visitar si te encuentras en la provincia de Cuenca. A tan solo media hora de la capital, este lugar de culto de estilo románico es una parada obligatoria para los amantes de la historia y la arquitectura.
Una joya arquitectónica
Compuesta por una nave central y dos laterales, la iglesia cuenta con tres ábsides que te dejarán maravillado. El artesonado de madera, con influencias mudéjares, es simplemente impresionante. Podrás admirar columnas y capiteles romanos provenientes del yacimiento de Valeria, que dan soporte al techo y añaden un toque de historia al lugar.
En sus muros podrás encontrar sillares romanos, estelas funerarias y decoraciones visigodas que te transportarán en el tiempo. No puedes perderte el famoso “Pozo Airón” ubicado en una de las naves laterales, que sigue teniendo agua y guarda una tradición celtíbera.
Un tesoro histórico
Valeria, antaño sede episcopal hasta el siglo XII, alberga esta magnífica iglesia que cuenta con un pequeño Museo Episcopal. Aquí podrás disfrutar de una excelente colección de relicarios y casullas, aunque parte de su tesoro se perdió durante la guerra civil.
Para una experiencia aún más enriquecedora, te recomiendo realizar la visita guiada por Juana, una historiadora apasionada y comprometida con la recuperación de Valeria. Con sus relatos, la historia de la iglesia cobrará vida y descubrirás detalles fascinantes que de otra forma pasarían desapercibidos.
Si estás planeando tu visita a la Iglesia de Nuestra Señora de la Sey, no olvides llamar al centro de visitantes de la Ciudad Romana de Valeria para confirmar que la iglesia esté abierta al público. No te pierdas la oportunidad de explorar este tesoro arquitectónico y sumergirte en su fascinante historia.